Ha sido una experiencia muy gratificante, acompañar a mis queridos alumnos y alumnas desde su infancia a una juventud tan competente, solidaria, generosa y para mi especialmente maravillosa.
En pocas palabras quise expresar los sentimientos y deseos que me embargan al asumir esta tarea de madrina.
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GRADUACIÓN DE BACHILLERATO 2019
DISCURSO MADRINA DE PROMOCIÓN
Es para mi un
honor y un agradable deber asumir el rol que el Claustro de profesores ha
tenido a bien confiarme, “MADRINA DE PROMOCIÓN 2017-2019”
Desde que lo
acepté no he parado de sumar ideas y de relacionar todo lo que veo y escucho,
con vosotros.
No ha sido una
tarea fácil, pero, espero que al final, podemos decir todos, que ha sido
gratificante.
Pienso que el ser
madrina de esta promoción no es casualidad, sino más bien, como decimos los
creyentes “ha actuado la providencia”.
Coincide que fue
el último grupo que tutoricé al final de su etapa de Primaria, en 5º y 6º.
Ser tutora es mi
auténtica vocación. Siempre defiendo el ser lo que yo denomino “MAESTRA DE
FAMILIA”. Maestros y maestras que impartan el mayor número de materias a su
alumnado, que conozcan las circunstancias familiares, que sean la guía en su
aprendizaje y los dejen preparados para aprender a aprender.
Esta vocación no
nace, se hace. Se hace con la formación continua y el contacto directo con las
familias conociendo sus inquietudes, sus alegrías y preocupaciones.
La segunda
coincidencia:
En 1981, entré
en la librería Reguera de la Avenida Ciudad Jardín y entre todos los títulos
que consulté hubo uno que me capturó “Aprender a ser”, actualmente sigue
siendo mi libro de cabecera, se trataba de las conclusiones de la tarea que
la UNESCO encomendó en 1971 a Edgar Faure (Ex presidente del Consejo y Ex Ministro
de educación francés) para afrontar la EDUCACIÓN DEL S. XXI. Y aquí me veo,
siendo la MADRINA de la Primera Promoción inmersa en el S. XXI.
“Aprender a
ser”, expresaba en 3 palabras lo que quería ser como maestra y en estos
últimos años, como directora de una escuela abierta e innovadora. Salir de
las clases magistrales que marcaron mi infancia, donde el miedo tenía un
papel importante y aprender y crecer junto a mis alumnos y alumnas.
Cuando nos
pidieron un eslogan para nuestra página Web, me surgió “Aprender para
emprender”. Emprender es ser, crecer, crear e imaginar.
En la escuela
aprendéis a ser personas sociales, a vivir en grupo aceptando las reglas
establecidas.
Os enseñamos
poesía y no somos poetas, os enseñamos el mundo y no somos aventureros, ni
aventureras, os curamos y no somos enfermeras e incluso os confesamos y
ponemos la penitencia.
Os hice tocar el
himno de Andalucía con la flauta y no soy músico (recordáis la partitura de
las flautas con los agujeritos tapados), pero lo tocabais de maravilla.
Y cantar… No sé
cantar, pero hemos cantado juntos.
Ahora, quiero
que me acompañéis a escuchar una canción, pero no sólo con los oídos, con el
alma: “Desde la azotea” de Niña Pastori.
Es una canción
de amor y desamor, pero, entre líneas me deja ver una metáfora. Os imagino de
puntillas diciéndome: “Teresa, ¿Qué se ve? ¿Qué se ve? Queriendo ver lo que
hay al otro lado de la escuela.
Ahora habéis
crecido, estáis preparados y preparadas para verlo, no sólo desde la azotea,
como escucharéis en la canción, sino para salir al mundo a conocerlo,
conquistarlo y hacerlo vuestro y nosotros…vuestros profes, nos quedaremos
aquí, esperando que volváis con vuestras experiencias y vivencias y nos volveréis
a cargar de ilusión para seguir disfrutando de nuestra labor docente.
Vamos a escucharla…
(Suena “Desde la
azotea de Niña Pastori)
La última de las
coincidencias:
Este curso,
estamos inmersos en la promoción de la Agenda 2030 que la ONU ha fijado no
sólo para mejorar la Educación, como hizo en 1971, sino que, en 17 Objetivos,
conocidos por ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible), se ha propuesto
mejorar la vida de todos y construir un mundo mejor.
Y sois vosotros
de nuevo, nuestro referente, los adultos que tendréis que defenderlos.
Si queréis mi
consejo: Mantened una actitud abierta, observadora, positiva, seguid
innovando, pero sin perder de vista los valores tradicionales, tened
paciencia y no seáis crueles con vosotros mismos, aceptar vuestros errores
como una oportunidad para aprender, no perdáis vuestra confianza.
Tenéis un
potencial social, cultural, técnico… Descubridlo y disfrutadlo.
Os queremos y os esperamos
¡Enhorabuena!
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